Capitulo 16: Perdon

Fui hasta mi lugar preferido de toda la ciudad, la mercería, entre y fui directo hasta el pasillo del color amarillo. Compre unas cuantas telas y me quede mirando otros pasillos un tiempo, amo estar entre telas. Me siento contenta y puedo pensar tranquila. Mire la hora y me di cuenta que era tiempo de volver a mi casa. Pague las telas y volví a casa. Cuando entre no estaban mis papas, fui a la cocina y había una nota que decía que se habían ido, pero que Lila se quedaba y que volvían en dos horas. Mejor. Me encanta estar sola en casa, fui a mi cuarto y puse mis parlantes con mi Ipod a todo volumen, saque mi maniquí del armario y empecé a hacer el vestido. Cuando termine, luego de una hora de mucho trabajo, estaba enredada entre medidores y telas, tenia mechones de la colita que tenía echa sueltos por todos lados. Me tire en mi cama y mire al techo. Algo golpeo mi ventana, me acerque y era Luke tirando piedras. Abrí la ventana y me asome.
- Hola Romeo.-lo salude.
- Julieta, te puedes mover así entro por la ventana.
- Estoy sola, te voy a abrí la puerta.
- Mejor, no tenia ganas de saltar.-dijo y se fue hasta la puerta de mi casa.
Fui hasta la entrada y le abrí.
- Hola mejor amigo.-lo salude y le di un abrazo.
- Hola mejor amiga.-dijo y me devolvió el abrazo.
- ¿Qué hacías? Estas echa un desastre.-dijo mirándome de arriba abajo.
- Mi disfraz para el baile de Halloween.
- ¿Lo hiciste tu sola?
- Si, entra.-le dije y entramos, fuimos a cuarto y le mostré el disfraz de hada.
- Odio tener que disfrazarme de hombre lobo.
- Y yo de hada.
- ¿Por no puede cada uno elegir un disfraz y punto?
- Son las reglas del colegio.
- ¿Te enteraste que este año van a venir humanos a la fiesta?
- Estas de broma.
- No, es enserio. Seguro se disfrazan de drácula, ya quiero ver la cara de los vampiros.
- Tal vez se disfrazan de princesas y de fantasmas.
- O de gatitos o conejitas.
- Va a ser divertido.
- Si, aunque tus alas no van a pasar desapercibidas.-dijo agarrando mi ala de la punta.
- Van a parecer verdaderas.-dije mirándolas.- ¿Tú ya tienes tu disfraz?
- El de todos los años. Un disfraz de lobo, no me dejan transformarme.
- No puedes hablar si estas transformado.
- Estoy practicando, pero no me va muy bien.
- Algún día me tienes que mostrar.
- Veo que te encariñaste con mi buzo.-dijo mirando que tenia puesto su buzo.
- Es calentito y cómodo.
- Te lo regalo.
- ¿Qué?
- Si, te lo regalo. A mi no me sirve y veo que te gusto mucho.
- ¿Y si te preguntan donde esta tu buzo?
- Se me rompió cuando me transforme.
- Mentiroso.
- ¿Qué le sucedió al buzo que te compraste en el mundo mágico?
- Eh, nunca lo use todavía.
- ¿Por qué?
- Es que no tuve la oportunidad, el martes lo uso.
- ¿Y el lunes que vas a usar?
- El tuyo.-dije como si fuera algo obvio.
- Em, van a reconocer mi olor, no lo puedes usar.
- Es el olor de mi perra.
- ¿Tu perra huele a licántropo?
- No, pero huele parecido.
- Vamos a olerla.-dijo. Salio de mi cuarto y volvió con mi perra en brazos. La olfateo y luego la bajo y dejo que se fuera.
- ¿Y?
- Tenías razón, olemos muy parecido.
- Siempre tengo razón.
- Espero que no.-murmuro.
- Te escuche, ¿Por qué quieres que no siempre tenga la razón?
- Están sospechando de que estoy saliendo con alguien de otra especie.
- ¿Estamos en problemas?
- No, todavía no.
- Luke te tienes que ir, mis papas están por llegar.
- Te paso a buscar mañana.
- Nos encontramos en la plaza. Así nadie sospecha.
- Dale, nos vemos mañana a las siete en la plaza.
- Perfecto.-dije mientras salíamos de mi cuarto y lo acompañaba a la puerta.
- Em, están tus papas del otro lado.-murmuro.
- Corre a mi cuarto y sal por la ventana cuando yo diga ¿Cómo les fue?
- Nos vemos.-dijo y corrió a una velocidad inhumana a mi cuarto y entro sin hacer ni un ruido. Abrí la puerta y mis papas entraron.
- ¡No encontraba la llave!-dijo mi mama.
- Creo que esta en la mesa.-dije señalando la mesa y cerrando la puerta después de que entraran.
- Gracias hija.-dijo mi papa.
- ¿Cómo les fue?
- Bien, fuimos a pasear un poco y volvimos. ¿Terminaste tu disfraz?-dijo mi mama. Mire a la ventana y Luke estaba caminando por allí y me saludo con la mano.
- Si, yo lo termine. Ahora lo traigo.-volé a mi cuarto, saque el vestido del maniquí y lo lleve a la sala.
- Es liadísimo.-exclamo mi mama mientras sostenía el vestido enfrente de ella.
- Perfecto para ti.-dijo mi papa.
- Me tengo que ir a hacer tarea.-dije al recordar la tarea de Literatura que me habían dado.
Me tire en mi cama y me puse a hacer la tarea, estuve dos horas y por fin la termine. No tenía hambre así que me quede en mi cuarto, prendí la computadora y entre en mis mail. Tenía un mail del colegio que volvía a avisar sobre el baile, ¿Cómo si no les bastara con todos los carteles colgados en la calle y los anuncios en el colegio? Apague la computadora y me tire en mi cama a escuchar música. Alguien toco mi puerta y luego entro y prendió la luz.
- Emily, tienes visitas.-dijo mi mama.
- ¿Quién vino a visitarme a esta hora?-dije reprimiendo un bostezo.
- Tom.
- Dile que se largue de aquí.-dije volviendo a ponerme mis auriculares y a escuchar música.
- Dice que necesita hablar contigo.
- Esta bien, dile que suba.
- El dice que te espera en la terraza.
- Ya voy.-dije mientras apagaba el Ipod y me ponía el buzo de Luke, ahora mi buzo. Salí de mi cuarto y subí a la terraza, estaba Tom con un equipo de música.
- Hola, por favor déjame explicarte algo.
- Rápido.-dije secamente.
- Se cuanto te gusta buscar una canción para cada situación. Así que yo encontré una canción perfecta para esta situación. Espero que te guste.- y pulso el botón de play. Se empezó a escuchar la introducción de My life will suck without you de Kelly Clarkson, una de mis canciones favoritas. Por primera vez Tom tenia la razón con lo que decía, la canción era perfecta, yo no puedo vivir sin el y el sin mi. Comencé a reír y Tom me miraba extrañado, corrí y lo abrace.
- And, honestly my life will suck without. - Canto.
- Por favor no seas cantante excepto que quieras dejar sordo a todo el mundo.-le dije tapándome los oídos.
- ¿Me perdonas?
- Te perdono. ¿Amigos?
- Amigos.-dijo y me devolvió el abrazo.
- Me tengo que ir a dormir, ya sabes, mañana tengo entrenamiento.
- Me había olvidado.¿De quien es este buzo?
- De Luke, me lo regalo.
- Ya recuerdo cuando te lo dio. ¿Están saliendo?
- No, somos mejores amigos.
- Ah, ¿Ya tienes pareja para el baile?
- Ni se te ocurra pedírmelo.